Llega septiembre y eso significa que ya están aquí las pruebas para las oposiciones a Guardia Civil. Los nervios están a flor de piel y son muchos los aspirantes que buscan consejos para aprovechar los últimos días antes de las pruebas.
Hoy en Gesinpol comparto contigo algunas recomendaciones sobre qué hacer los días previos de un examen de oposición. Mantén la calma. ¡Estás a punto de conseguirlo!
Consejos para los días previos a una oposición
Los días previos a una oposición son cruciales y cómo los manejes puede hacer una gran diferencia en tu rendimiento.
Aquí te dejo algunos consejos prácticos, basados en mi experiencia y en lo que he visto que funciona para otros, para que llegues a tu examen en las mejores condiciones posibles.
1. No estudies materia nueva
Sé que puede ser tentador intentar abarcar más material en los últimos días, pero estudiar cosas nuevas justo antes del examen es un error.
Es muy difícil que puedas retener conceptos nuevos en tan poco tiempo y, además, con la presión del examen encima, lo más probable es que termines confundiendo a tu cerebro.
Mi consejo es que te centres en repasar lo que ya sabes, reforzando los conceptos clave en lugar de intentar aprender algo nuevo a última hora.
Al final, es más importante tener una comprensión sólida de lo que ya has estudiado.
2. Fija los conceptos principales y crea un mapa mental
Estos días deberían enfocarse en consolidar la información que ya tienes en tu cabeza. Una buena estrategia es crear un mapa mental que conecte los conceptos principales que has aprendido durante tu preparación.
Este mapa te permitirá visualizar la información de manera clara y organizada, haciendo que sea más fácil recuperarla durante el examen.
Usa colores y diagramas para hacer que este proceso sea más visual y dinámico. Es casi como si estuvieras organizando un archivo en tu cerebro, asegurándote de que todo esté en su lugar y listo para ser encontrado cuando lo necesites.
3. Trabaja en tu seguridad y confianza
La confianza es clave en estos últimos días. Recuerda todo el tiempo y esfuerzo que has invertido en prepararte para este momento. Has hecho tu parte, y ahora es momento de confiar en ti mismo.
Una mentalidad ganadora puede ser la diferencia entre un buen desempeño y uno excelente.
Repetirte frases como “Estoy preparado” o “Voy a dar lo mejor de mí” puede reforzar esa confianza. También ayuda hablar con alguien que te apoye y te anime, ya que el refuerzo positivo externo puede ser muy motivador.
4. Despeja tu mente el día antes del examen
El día antes del examen es fundamental para relajarse. Haz actividades que te gusten y que te ayuden a desconectar, como salir a caminar, ver una película o simplemente leer un libro ligero.
Intenta no pensar demasiado en el examen y evita repasar frenéticamente. Recuerda que el descanso es tan importante como el estudio.
Acuéstate temprano y asegúrate de dormir las horas necesarias para que tu mente y cuerpo estén frescos el día del examen.
5. Prepara todo con antelación
Una de las mejores maneras de evitar el estrés innecesario el día del examen es tener todo listo la noche anterior. Prepara los documentos que necesitas, como tu identificación y el material permitido (bolígrafos, lápices, etc.), y asegúrate de que tu ropa y calzado estén listos.
No dejes nada al azar ni para última hora, porque cualquier imprevisto podría aumentar tu ansiedad. Una vez que todo esté preparado, podrás dormir tranquilo sabiendo que no tendrás que preocuparte por nada más al día siguiente.
6. Familiarízate con el lugar de las pruebas
Si es posible, da una vuelta por el lugar donde se realizarán las pruebas unos días antes. Esto te ayudará a familiarizarte con el entorno y te dará una sensación de control cuando llegues el día del examen.
Saber dónde están las entradas, las salidas, los baños y las zonas de descanso puede reducir el estrés y permitirte concentrarte únicamente en el examen. La confianza que te da conocer el lugar es un factor que a menudo se pasa por alto, pero que puede tener un impacto positivo en tu tranquilidad mental.
7. Cuida tu alimentación e hidratación
Finalmente, no descuides tu alimentación e hidratación en los días previos al examen. Comer sano y mantenerte bien hidratado es esencial para que tu cuerpo y mente funcionen a su máximo nivel.
Opta por comidas equilibradas que incluyan proteínas, carbohidratos complejos y grasas saludables y evita los alimentos procesados o pesados que puedan hacerte sentir lento o incómodo. También, lleva contigo una botella de agua el día del examen para mantenerte hidratado durante la prueba.
Cómo gestionar los nervios el día del examen
Una técnica que nunca falla es la respiración profunda. Cuando sientas que los nervios están a punto de desbordarse, detente un momento y respira profundamente. Inhala por la nariz durante cuatro segundos, mantén el aire por otros cuatro, y exhala lentamente por la boca. Repite esto varias veces. Este ejercicio ayuda a reducir la ansiedad y a recuperar la concentración.
Recuerda todo el esfuerzo que has puesto en prepararte para este día. Has estudiado, has practicado y ahora es el momento de demostrarlo. Confía en todo ese trabajo duro.
Es fácil dejarse llevar por pensamientos sobre los resultados o sobre lo que podría salir mal. Sin embargo, lo más útil que puedes hacer es concentrarte en el presente, en cada pregunta que tienes delante.
El día del examen es tu oportunidad para mostrar todo lo que has aprendido y estos pequeños consejos pueden ayudarte a estar más preparado y tranquilo. Recuerda, has trabajado duro para llegar hasta aquí y, con un poco de organización y confianza en ti mismo, podrás rendir al máximo.
¡YA QUEDA NADA! ¡ESTÁS ROZANDO TU SUEÑO!
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