Si te estás preparando las oposiciones a Guardia Civil, habrás notado que la preparación física que estás haciendo para aprobar la parte de prueba física, te ayuda también a estudiar de manera más proactiva.
Adoptar una rutina de ejercicio casi diaria mejora el nivel general de salud. Pero puede que también te hayas dado cuenta de que estás más alerta mentalmente después del ejercicio y que trabajas mejor los días que terminas tu sesión de entrenamiento que cuando decides saltártela.
Rutina de ejercicio
¿Te ha ocurrido que cuando has tenido demasiado trabajo y has necesitado saltarte el entrenamiento para empezar a trabajar de inmediato te sientes más espeso?
Es como si saltarte el ejercicio te convirtiera en un caparazón letárgico de tu yo productivo. Te sientes somnoliento, eres propenso a posponer las cosas y tu creatividad cae en picado.
Así que está claro que, el ejercicio es un refuerzo de productividad infalible.
Prácticamente todos los cerebros se benefician del ejercicio. La pregunta es… ¿por qué, exactamente?
El ejercicio aeróbico puede promover la neurogénesis, es decir, el nacimiento real de nuevas células nerviosas. Anteriormente, se creía que entrábamos en la adolescencia con todas las células nerviosas que alguna vez tendríamos y, a partir de ahí, morirían lenta pero seguramente sin ser reemplazadas.
Los científicos también han descubierto que el ejercicio regula y optimiza los niveles de neurotransmisores como la noeprinefrina, la dopamina y la serotonina. Los cuales juegan un papel clave en la capacidad del cerebro para prestar atención, mantenerse motivado y aprender de manera efectiva.
El ejercicio tiene muchos otros efectos de gran alcance en el cerebro. Se ha demostrado que es beneficioso para las personas con una variedad de afecciones, desde ansiedad y depresión crónicas hasta TDAH. También nos ayuda a envejecer con más gracia, y previene la aparición de enfermedades como el Alzheimer.
Por tanto, no es buena idea saltarte la rutina de ejercicios diario. Tu cuerpo y tu mente te lo agradecerán. Y recuerda, cada día cuenta.
¿Quieres crear una rutina diaria de entrenamiento? Lee nuestro post: ¿Cómo crear un hábito de entrenamiento para preparar las pruebas físicas?